El único tratamiento para la enfermedad celíaca es la alimentación libre de gluten; pero asegurar alimentos libres de gluten para cada comida de cada día todos los días, y al mismo tiempo incorporar los valores nutricionales necesarios para una vida sana… ¡está lejos de ser sencillo! Si a esto le agregamos que las personas celíacas deben comer fuera de casa, ya sea en la oficina, la escuela o la Universidad, las cosas seguramente se complican.
Consejos para organizar tu menú sin gluten
A continuación 7 consejos para organizar el menú y llevar una vianda segura basada en la llamada “dieta mediterránea”. Sin dudas la dieta mediterránea se adapta perfectamente a las necesidades de las personas celíacas y los que padecen otro tipo de intolerancias alimentarias, ya que esta dieta utiliza un máximo de alimentos naturales. ¡Por algo ha sido llamada “la dieta de los dioses”!
Algo más sobre la dieta mediterránea
La dieta mediterránea nació en Creta y de hecho se considera que es una de sus mayores contribuciones a la cultura gastronómica. Se basa en los productos de la tierra, especialmente el aceite de oliva, beneficioso para el corazón y el buen funcionamiento de todos los órganos. Las preparaciones se aromatizan con hierbas naturales, también con poderes terapéuticos, y se endulzan con miel obtenida del néctar natural de las flores de la región. Otros productos son los cítricos, castañas y pistachos. Entre los lácteos se destacan los quesos de cabra. Herencia que hoy en día puede disfrutar toda la Humanidad, la dieta mediterránea representa un estilo de vida armónico con la Naturaleza y respetuoso de las culturas.
Sigue nuestros consejos
- Asegúrate de incluir por lo menos una porción de cada uno de los 4 grupos de alimentos: verduras y frutas; productos de granos; leche y alternativas; carne y alternativas.
- Mejor en colores: la “paleta de la alimentación saludable” nos indica que debemos consumir diariamente porciones de frutas y verduras de… ¡5 colores diferentes! Procura variedad de colores entre las frutas y verduras crudas o cocidas.
- Utiliza tortillas para hacer los sándwiches, rellénalos con carnes blancas con poca grasa y reemplaza la mayonesa por pasta de garbanzos.
- Añade una sopa que puede hacerse más cremosa agregando legumbres cocidas y procesadas;
- No te quedes sin postre: para variar, en vez de frutas puedes incluir un yogur, una porción de queso y dulce, un postre de maicena o un flan casero.
- Calma la sed: evita las bebidas azucaradas y gaseosas, no aportan nutrientes y son una de las principales causas de obesidad infantil. Prepara refrescos en casa y llena la botella individual cada día; también puedes preparar limonada y simplemente agua fresca, que es la mejor opción.
- ¡Consulta siempre nuestras recetas!