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Las semillas son una incomparable fuente de nutrientes y tienen una gran variedad de propiedades terapéuticas. De sabor agradable, son conocidas desde los tiempos más remotos. Te invitamos a conocer los granos y semillas que la alimentación actual está revalorizando.
1) Chía: cultivo originario del sudoeste de México y del noroeste de América Central; ya era consumida por los pueblos precolombinos que cultivaban grandes áreas.
2) Sésamo: planta originaria de la India, se extendió hace más de 3000 años a China, Medio Oriente y África, incorporándose a la cocina occidental en las últimas décadas. De gran poder nutritivo y aromatizante, se utiliza en postres y preparaciones saladas, tanto la semilla como su aceite. Ticas en vitamina E, fibras y minerales como calcio y potasio, tienen reconocidas propiedades antioxidantes y su consumo favorece el tránsito intestinal.
3) Sorgo y mijo: ricas en vitaminas E y B, no está muy difundido su uso en la alimentación humana, sin embargo pueden consumirse enteras aprovechando así las propiedades de la cáscara.
4) Amapola: muy utilizadas en la repostería y cocina centroeuropea y oriental, las semillas de amapola contienen fósforo, calcio y fibras y aportan aminoácidos a la dieta. Además tienen propiedades medicinales, como analgésico y calmante suave de dolores y calambres. Se conocen dos tipos de semillas de amapola (blanca y negra) aunque sus propiedades y sabor son iguales. Para incorporarlas a tus comidas, tuesta levemente un puñado de semillas y agrégalas a las ensaladas y postres.
5) Girasol: el uso más conocido es el aceite, pero pueden incorporarse fácilmente a la dieta agregando las semillas peladas (“pipas”) a panes y ensaladas, o consumirlas directamente, a modo de colación o acompañando bebidas. Tienen un alto contenido en fósforo y magnesio y desde el punto de vista medicinal aportan calcio y ácido linoleico.
6) Lino: un cultivo con grandes propiedades terapéuticas, revalorizado en la dieta ya que se cultiva casi exclusivamente para uso en diversas industrias. Sus semillas tienen poder diurético, laxante y antiinflamatorio; se recomienda preparar una infusión con dos cucharaditas de semillas de lino en medio litro de agua hirviendo. Contiene muchos nutrientes, fibra y ácidos del grupo omega 3.
7) Zapallo: alto contenido de grasas de tipo insaturadas, también aportan vitaminas A y B y minerales como selenio, magnesio y zinc.
8) Amaranto: aportan de proteínas y varios minerales y vitaminas. Suele consumirse también la hoja, aunque las propiedades se encuentran en las semillas.
Antes de incorporar semillas a tu dieta…
- Toma en cuenta que el consumo de la semilla entera permite aprovechar mejor sus propiedades; Lo habitual es integrar una o dos cucharadas de semillas a la dieta diaria, pero antes de comenzar consulta con tu médico; en el caso de algunas enfermedades intestinales su consumo puede ser contraindicado.
- Incorpora las semillas en forma progresiva, comenzando con una cucharadita de café hasta llegar a una cucharada sopera, según la respuesta del organismo;
- Agrega semillas a las ensaladas, yogur, quesos descremados, caldos, salsas y panificados y… ¡bon apetit!
¿Cómo es tu experiencia con el consumo de semillas en tus comidas?
